Después de una primera excursión a Deva en la que pusimos a trabajar todos nuestros sentidos, nos tocó volver a Deva con una lupa en mano para localizar criaturas más pequeñas que parece que juegan al escondite para escapar de nuestros ojos como si de una travesura se tratara, pero lo que no sabían estos seres vivos de pequeño tamaño es que íbamos muy preparad@s con diversos artilugios para observarlos detenidamente muy, muy de cerca.
Antes de empezar nuestra intensa búsqueda, estuvimos en una sala viendo una presentación con la que aprendimos a identificar la gran familia que forman los insectos. Una vez interiorizadas sus características, salimos al campo a "sacarlos" de sus escondites para que así pudieran mostrarnos su mejores galas. Después de una jornada intensa como exploradores, pudimos descansar y jugar en el parque.
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